2008/02/28

En Armonia con los demas



La armonía con los demás nos hemos referido a la armonía que es necesario mantener entre nosotros mismos y los demás. Es imposible evolucionar e incluso vivir, sin establecer contactos frecuentes con nuestros semejantes. El hombre como ser viviente no es tan autónomo como puede creerse. La vida comunitaria es una necesidad para él, ya que ningún individuo, por muy independiente que sea, puede vivir feliz y desarrollarse plenamente sin satisfacer su necesidad innata de comunicación. Su instinto gregario es el que ha empujado al hombre a vivir en sociedad, ya hacer de esta sociedad la garantía de su bienestar familiar. Y ya que nos necesitamos los unos a los otros, es importante que nuestras relaciones con los demás no estén nunca basadas en principios de fuerza o dominación. Dicho de otra forma, debemos hacer todo lo posible para preservar la armonía en nuestra familia y vivir en buenas relaciones con todos aquellos a quienes debemos tratar, ya sea en el plano familiar o profesional, o en el cuadro más genérico de la colectividad humana. No hay nada más penoso, en nuestro interior, que vivir continuamente en un ambiente conflictivo. Toda situación de discordia entre uno mismo y los demás debe ser evitada, ya que lleva en ella misma el germen de todas las guerras que asolan al mundo. La armonía debe ser la regla de oro de la vida familiar y social. Esto no quiere decir que todos los individuos deban pensar, hablar y comportarse de igual manera, ya que la uniformidad es enemiga de la evolución. Esto significa simplemente que debemos vivir juntos en un respeto mutuo, con el deseo de poner nuestras diferencias de opinión y de comportamiento al servicio de los demás.


fuente Texto Rosacruz EL SANCTUM CELESTIAL